Noticias

Límites y masificación

Publicado 06.09.2022

Compartir

Límites y masificación

Playa grande de Alcúdia. Foto: Sebastià Torrens.

Es difícil ponerse de acuerdo sobre lo que está y no está masificado. Lo que es demasiado para unos no es suficiente para otros, pero las cifras no engañan y la lógica tampoco. A falta de tener datos finales, todo indica que 2022 será un año de récords y no cuesta nada entender que más vuelos, más coches, más embarcaciones, más casas, más cruceros, más motos de agua y, en definitiva, más personas en un territorio limitado, afectan negativamente la calidad de la experiencia del turista y la calidad de vida del residente; y erosionan el capital natural sobre el cual se sustenta la economía y el bienestar de las islas. 

Después de dos años muy difíciles, el turismo se ha recuperado con fuerza y también el necesario debate sobre los límites y la masificación. Nada de esto nos sorprende. Hace años que representantes de la sociedad civil, dirigentes políticos y también un grupo minoritario pero significativo de representantes del sector hotelero y turístico, piden la implementación de medidas para no morir de éxito

La recuperación del impuesto de Turismo Sostenible, la limitación de entrada de vehículos en Formentera, el acuerdo sobre el número máximo de megacruceros o la moratoria de plazas turísticas de la nueva Ley de Turismo, son pasos en la buena dirección que demuestran que algo está cambiando, pero extremadamente insuficientes para hacer frente a los retos a los que nos enfrentamos. 

Transicionar hacia un modelo verdaderamente sostenible que mantenga altos niveles de ocupación y de bienestar es posible, pero requerirá de medidas mucho más valientes y ambiciosas. Medidas que solo serán posibles si contamos con el apoyo de dos actores clave: la industria turística, que tiene una importante influencia política, y el gobierno central, que controla las principales infraestructuras de entrada en las islas.

Continuar leyendo la newsletter