El Observatorio Socioambiental de Menorca (OBSAM–IME) y la Estación de Investigación Jaume Ferrer inauguran el próximo 11 de diciembre en el Claustro de Carme de Maó la exposición El mar de Kike Ballesteros, una muestra dedicada al trabajo científico y fotográfico del biólogo y Ecólogo Enric Ballesteros Sagarra (1958–2024). La exposición, que recorre la diversidad y la singularidad de los principales ecosistemas del mar Balear, ha contado con el comisariado y diseño de Tomeu Sánchez y la colaboración de varias entidades.
Kike Ballesteros, una figura clave para el estudio del mar Balear
Enric Ballesteros fue un biólogo y naturalista de referencia internacional. Doctorado con premio extraordinario por la Universitat de Barcelona, dedicó toda su carrera al CEAB–CSIC, donde fue investigador y posteriormente director (1998–2002). Especialista en macroalgas, coralígeno, bioinvasiones marinas e impactos del cambio climático, es autor de más de 350 publicaciones científicas y obras de divulgación.
Su relación con Menorca fue siempre muy estrecha: llegó por primera vez a la isla el 1985 para trabajar como biólogo y siempre volvió. Para él, el mar Balear —y especialmente Menorca— era “el punto de referencia del Mediterráneo y una fuente constante de inspiración”. Sus investigaciones contribuyeron a la protección de espacios que hoy son áreas marinas protegidas. También colaboró en el diseño del seguimiento del medio marino del OBSAM-IME en su inicio y siempre asesoró a la entidad. Durante décadas trabajó con la Estación de Investigación Jaume Ferrer en el seguimiento de especies y hábitats marinos.
Una mirada científica y divulgativa sobre el mar Balear
La exposición está formada por doce paneles temáticos elaborados a partir de materiales científicos, explicaciones y fotografías de Ballesteros. El recorrido permite descubrir los principales hábitats submarinos de las Islas Baleares, desde los bosques de algas pardas hasta las praderas de posidonia, las cuevas sumergidas, el coralígeno, las bahías o las comunidades de peces. La muestra incluye también la Laminaría rodriguezii, una alga descrita por primera vez en Menorca, así como imágenes de la biodiversidad que forma parte de estos ecosistemas.
Ballesteros estaba convencido de que solo desde el conocimiento nace la voluntad de proteger. Por eso, además de los valores naturales, la exposición incorpora también algunas imágenes de los impactos que afectan el mar Balear, como la pérdida de hábitats o las algas invasoras. El conjunto ofrece una aproximación divulgativa del mar Balear y, a la vez, refleja la trayectoria y la contribución científica de Ballesteros en el estudio y la conservación de este entorno.
El proyecto ha contado con la participación del Centro de Estudios Avanzados de Blanes (CEAB–CSIC) —institución que ha facilitado parte del material fotográfico y ha contribuido en la búsqueda de contenidos—, de MARE y la Fundación Marilles, que han aportado apoyo en el retoque fotográfico y en el planteamiento inicial de la muestra, y del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (IMEDEA), que ha colaborado con algunos contenidos científicos.
