Gracias, Kike

A finales de noviembre nos dejó Kike Ballesteros. Con él, perdemos a una de las personas que más hizo por la investigación, la divulgación y la conservación del mar Balear y Mediterráneo. Con él, desaparece una persona única y singular; un entusiasta de la naturaleza en todas sus dimensiones.   

Su entusiasmo lo llevó desde las profundidades del mar hasta los lagos de alta montaña; desde el coral más grande del mundo en las Islas Salomón, hasta los bosques marinos que refugian las bahías someras de las Islas Baleares. Su mirada única hacía que las historias de especies poco conocidas por el gran público te hicieran vibrar de emoción. Su trabajo inspiró miles de personas y su humanidad y generosidad tocaron el corazón de tantas otras. Deja huérfanos a amigos de todo el mundo. Muchos de ellos, entre los que se encuentran gran cantidad de pescadores, son de estas islas.   

Kike fue una persona fundamental para nuestra Fundación. Siempre generoso con su tiempo, contamos con su colaboración desde el primer momento y hasta los últimos días. Nos sentimos privilegiados de haber podido ayudar a vehicular, aunque sea tan solo una fracción de su sabiduría y conocimiento al gran público balear.   

Hace diez años, cuando estábamos en proceso de establecer los cimientos de la Fundación Marilles, todo el mundo apuntaba en la misma dirección: “tenéis que hablar con Kike Ballesteros”. Y tenían razón. En una hora de conversación entretenida y pedagógica, trazó las líneas maestras, las prioridades y los retos a los cuales enfrentarnos si queríamos conservar el mar Balear. También nos dejó una de las frases que más hemos repetido durante los últimos años: “El mar Balear, a pesar de estar sometido a una fuerte presión, es todavía una de las regiones mejor conservadas del Mediterráneo”. O esta otra: "En las Islas Baleares todavía encontramos fondos marinos que nos muestran cómo era la península Ibérica hace ciento años”. Contenido, contexto y perspectiva. Kike dio a Marilles estos ingredientes esenciales para ayudarnos a andar e inspiró muchos de los proyectos que hemos financiado, con mención especial a Menorca y a la Dra. Marta Sales.   

Él deja su impronta en las miniguías y los pósteres de fauna y flora marina del mar Balear elaborados en colaboración con el gran ilustrador y amigo Toni Llobet -suyo es el dibujo que ilustra este artículo-, y la Sociedad de Historia Natural Balear. También tenemos su testigo grabado en Arxipèlag Blau, donde nos habla de los grandes depredadores que ha perdido el mar Balear, de los graves impactos de las algas invasoras y, sobre todo, de la necesidad de proteger las bahías someras, espacios de gran fragilidad que han sufrido una fuerte degradación en las Baleares.   

Fruto de su charla magistral en Mallorca nos regaló un documento valiosísimo donde identificó las zonas prioritarias a proteger en el mar Balear. Una obra donde condensó parte del inmenso conocimiento de los fondos marinos baleares que acumuló durante décadas. Y digo que lo regaló porque no quiso cobrar ni un céntimo. Kike consideraba que su deber como científico era aportar en favor del interés público.   

Kike, tu partida deja un gran vacío, pero también un sólido legado. Puedes estar seguro de que desde la Fundación Marilles continuaremos trabajando intensamente para conservar el mar que tanto amaste.   

¡Muchas gracias por todo! 

 

Aniol Esteban

Director